Hay muchas viviendas antiguas que tienen espacios bajo cubierta que antes se usaban como trasteros, desvanes o palomares. Sea cual fuere su uso anterior, es posible mediante una rehabilitación incorporarlas a la superficie habitable de la vivienda, para ganar metros o altura, o hacer de ellas hasta una casa independiente. Ahí van unos consejos para conseguir que resulten acogedoras y confortables.
1 – Conseguir que sea habitable
Para que una buhardilla sea habitable, tiene que cumplir unas premisas básicas: tener en la parte más baja una altura de 1.50 m, y para circular cómodamente un mínimo de 2.50 m en al menos un 30% de la superficie total. Como veis en esta foto, la parte más baja no es habitable pues mide bastante menos de 1.50 m, pero eso no implica que no se pueda aprovechar y crear un rincón con encanto.
Si la cubierta está en malas condiciones, es más económico reconstruirla que tratar de repararla. La reconstrucción puede ser parcial; se pueden sustituir las vigas, las tejas, incorporar aislamientos e instalar ventanas de techo.
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2 – Elegir acabados que aporten luminosidad
Un techo bajo puede resultar muy agobiante, y si es oscuro aún más. Para que a simple vista resulte más alto, una solución es pintar toda la estructura y el entrevigado de color blanco. Otra solución es dejar las vigas en color madera y pintar solamente el entrevigado de color blanco o colocar papel pintado, así se reduce el impacto visual de la madera. En el suelo se pueden emplear materiales continuos como moquetas de fibra natural, tarimas de madera natural o teñida, microcemento o pizarra.
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3 – Instalar un buen aislamiento
El aislamiento térmico y acústico se debe instalar en techos, paredes y suelos. Para el techo hay dos sistemas, entre cabios (tablero) o sobre éstos. En los primeros hay que emplear paneles semirígidos y dejar una separación entre el aislante y la cubierta para ventilar la estructura de madera. En la instalación sobre cabios se aconsejan tableros sándwich con el aislante incorporado, tipo onduline o termochip. En las paredes conviene crear una cámara aislada entre el muro y el tabique interior o trasdosar el muro con pladur. Para aislar el suelo se suele colocar un aislante entre las vigas. Si es de madera se puede construir un entarimado doble con aislante intermedio.
4 – Asegurar la luz y la ventilación
Las opciones de apertura de nuevos huecos son muy variadas, eso sí, siempre es necesario contar con la oportuna licencia de obras y la aprobación de la comunidad de propietarios.
Las ventanas juegan un papel decisivo en su elección e instalación. Con las ventanas de techo tipo Velux se consigue un 40% más de luz natural que con una ventana normal de pared. Otra opción si el tejado llega a ras de suelo , la firma Velux cuenta con ventanas de antepecho que aportan vistas panorámicas. Hoy en día la mayoría de marcas para este tipo de ventanas cuentan con sistemas de accionamiento domótico. Solo hay que instalar y enchufar, incluso incorporan un sensor que cierra la ventana automáticamente cuando empieza a llover.
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5 – Instalar muebles a medida
El objetivo principal es sacarle el máximo partido a la estructura adaptándole muebles a medida con diferentes usos.
Los armarios son perfectos para ordenar el espacio bajo un techo inclinado en la zona más baja. Si se colocan siguiendo la pendiente se sacará partido hasta el rincón más insospechado, ya que ordenan huecos que de otra forma quedarían desaprovechados. Para aliviar su aspecto visual conviene que el acabado y/o color sea similar al de techos, suelos o paredes.
Las estanterías, librerías o zapateros (como éste de la foto), aprovechan el espacio tanto en la parte más baja como en la más alta.
6 – Adaptar la distribución a la altura del techo
Las camas y literas conviene situarlas en las zonas más altas de la pendiente. En los cuartos de baño, tienen preferencia el lavabo y la ducha en las zonas más altas y el resto de sanitarios pueden instalarse en las zonas más bajas.
Alex Chambon
Dependiendo del estado en que esté, renovar vuestra bajo cubierta puede hacerse por cuatro duros o invirtiendo una mayor cantidad de dinero; si os encontráis en el segundo caso existen ayudas para la rehabilitación de edificios construidos antes de 1981 en nuestro país. Podéis consultarlas a través de la web http://www.fomento.gob.es/rehabilitacion
Créditos fotografía portada: Drawhome